Espectador

Y es que es lindo comprar las entradas, ir al teatro, y ser espectador. Ver la vida increíble de otras personas, verlo todo desde la comodidad de tu asiento, desde la butaca que no te deja involucrarte o ser ese actor. Y reir, llorar, y disfrutar de las cosas increíbles que le pasan a otros, y desear que ese otro algún día seas vos. Meterte en personaje, disfrutar lo qué sabes que jamás va a sucederte, y volver a tu casa con tu pecho un poco más vacío, triste, sin entender por qué nada de eso nunca coincide con tu realidad o tu destino.
Y a veces, somos esos espectadores en nuestra propia vida, en nuestro día a día. Y vemos como los sueños se le cumplen a esos otros: Los vemos viajar a lugares hermosos, vivir y tener historias de amor inimaginadas y de película, cumplir cada una de sus metas, conseguir ese trabajo que tanto quisieramos tener, vivir cosas que a nosotros nos parecen lejanas e inexistentes, pero sin embargo, sabemos que existen: Le existen a esos otros que no son nosotros, porque decidimos de antemano que así siempre va a ser. Nos resignamos a vivir la vida desde fuera, observando como los demás la disfrutan, como los demás reciben noticias de esas que te alegran una tarde de un martes cualquiera, como los demás se van a vivir a otros países, conocen al amor de su vida en el lugar más insólito y todo funciona como si hubiera sido escrito, tienen amistades perfectas, viven y después piensan, y mientras nosotros miramos... Nos convencemos de que todo lo mágico es para el resto, para el que actúa. Y no para el que compra el espectáculo y se sienta a verlo pasar. Nos convencemos de que el destino de ellos es participar, y nuestro destino es pagar y observar.
¿Y vos, no soñás con cosas imposibles? ¿No creés que algo bueno te puede estar a punto de pasar? ¿No te imaginás un día involucrarte, ser de los que viven alguna de esas cosas que parecen de cine, que parecen inconcebibles hasta que ya no lo son más? ¿Y vos quién sos para decirte todo el tiempo a vos mismo, que nada bueno puede estar por llegar? Ya sé, la vida te demuestra constantemente que tu destino es la rutina aburrida y monótona, que todo el resto te toca mirarlo en fotos, en textos, o escucharlo en historias que te cuentan los demás. Ya sé, desde el principio te convences de que tu lugar es la butaca, de que todo siempre termina mal, o de que lo emocionante, lo que te hace acordar que sos joven, lo que contás y nadie puede creer que te esté ocurriendo, lo que te sacude, lo que te recuerda que tu cuerpo tiene sangre caliente, que estás vivo, y viviendo, y sintiéndo, lo que te despierta, lo que pensás que jamás te va a pasar pero te pasa... Que todo eso en tu día a día nunca tuvo lugar. Y es verdad, fuiste mucho tiempo espectador, y ya te cansaste de acostarte y soñar con algún día ser el actor de esa novela increíble, ser el que vive algo que creía imposible. Lo sé, cada día te decepciona, y te cansaste de imaginar. Pero seguí imaginando.
Imaginá que lo bueno te sucede, imaginá con todas tus fuerzas que tus mejores días y tus anécdotas mas increíbles están todas por delante tuyo, que tu sonrisa más sincera está adelante y no detrás. Lo sé, creés que para siempre vas a estar del lado del público, pero deseá, confiá en que te puede pasar. Te lo aseguro, tu presente siempre nace de una idea, somos lo que pensamos porque primero se imagina, y después se vuelve realidad. Y a veces sólo hace falta un abrir y cerrar de ojos, a veces en un instante todo cambia, a veces la magia es inmediata, a veces hay meses que no dicen nada, y minutos que te determinan para siempre y para mejor.
Sé que te cansaste de vivir con tu cabeza en alto y despertarte todos los días en el suelo, pero soñá con algo más, involucrate, y dejá de mirar. Andá a encontrarte con la vida, sonreíle a todos al pasar, creé en todo eso que te dijiste que era imposible, y donde sea que estés, involucrate de verdad. Porque ahí, en lo imposible, está lo que en cualquier momento podés encontrar.
Soliannaci

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