Futuro

Mi cabeza va demasiado rapido y desentona con esta madrugada tranquila. Todos duermen, yo no paro de pensar. Quién fuí, quién soy, quién voy a ser. ¿Lograré algo? ¿Estoy yendo a algún lado? ¿Estoy estancada en el mismo lugar? Las preguntas me consumen, las respuestas no las tengo. Nudo en el pecho y más dudas. ¿Seré merecedora de cosas buenas? ¿Estoy haciendo algo para cumplir cada una de mis metas? El terror de no estar avanzando en tu presente hacia ningún futuro prometedor, de estar varado en el punto exacto en el que no hay nada, terror de que el tiempo siga pasando y las situaciones no avancen con él, de ser la misma que fui hace 3 años, de ser la misma que voy a ser dentro de 3. La incertidumbre al futuro, el miedo de no ser, de no llegar, de no alcanzar. Estás en una ruta de noche y no ves que hay adelante. Entonces sólo manejás, rogás que el auto realmente esté en movimiento, rogás llegar a algún lugar sano y salvo, rogás llegar a destino en algún momento.
¿Cuál será? Ojalá ese destino valga todas estas madrugadas con sabor a ansiedad.

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